Desde el momento en el que nos despiden podemos solicitar la prestación por desempleo, o lo que conocemos como el paro. ¿Cuál es el plazo para solicitar el paro? ¿Puedo solicitar el paro fuera de plazo?
¿Cuál es el plazo para solicitar el paro?
Aunque hay personas que lo desconocen, hay un límite de tiempo hasta el que se puede pedir el paro desde que se termina un trabajo. Esta prestación conocida como la prestación contributiva, sólo la pueden cobrar los trabajadores que cuentan con un mínimo de 360 días de cotización acumuladas, y que no se hayan consumido, en los últimos seis años.
Actualmente, en 2022, el plazo para solicitar el paro es de 15 días, a partir del día siguiente desde que se finaliza la relación laboral. Sin embargo, hay que tener en cuenta cómo se cuenta el plazo para poder obtener la prestación.
Se considera la fecha de solicitud como el momento en le que se solicita la cita previa para obtener el paro. Y es que para poder conseguir la prestación por desempleo es necesario obtener cita previa en el SEPE (el antiguo INEM), por lo que no importa en qué fecha sea la cita que nos han concedido, sino el momento en el que a solicitamos.
Otro aspecto a tener en cuenta es que se trata de un plazo de 15 días hábiles, por lo que no se cuentan sábados, domingos ni festivos.
¿Puedo solicitar el paro fuera de plazo?
Estos quince días que se indican desde el Servicio Público de Empleo Estatal no son una obligación, pero sí una recomendación. Cualquier trabajador puede solicitar el paro pasados los 15 días hábiles sin mayor dificultad que hacerlo en el plazo establecido.
Desafortunadamente, solicitar el paro fuera de plazo tiene algunos contratiempos, que se agravan especialmente mientras mayor es el tiempo que se deja correr antes de presentar la solicitud para la prestación contributiva por desempleo.
La administración pública tiene constancia en todo momento de las fechas en las que se acaba una relación laboral, así como cuándo se solicita la cita previa para poder llevar a cabo la solicitud. También se tienen en cuenta las fechas en el caso de las pre solicitudes en el caso de hacer uso de ella. Por esa razón no hay que preocuparse demasiado con los resguardos, aunque siempre es bueno tenerlos a buen recaudo.
En el caso del tiempo que tiene el SEPE para contestar a la solicitud para recibir la prestación por desempleo, la administración deberá de ofrecer una respuesta en un plazo inferior a los 15 días siguientes a la fecha en la que se presentó la solicitud, siempre y cuando no falte ninguna documentación. La notificación de la entrega del paro se deberá enviar en un plazo de 10 días a partir de la fecha de la resolución.
Qué sucede si no solicito el paro en plazo
¿Qué pasa si pasan los 15 días y aún no he pedido la cita previa o presentado la pre solicitud del paro? Ya hemos visto que sí se puede solicitar el paro fuera de plazo, pero, ¿cuáles son los problemas de hacerlo?
No se pierde el derecho a la prestación pero sí que se pierden los días que se haya retrasado en la presentación. Esto quiere decir que, todos los días que hayan pasado desde el décimo quinto día que fijan como límite en la administración para solicitar la prestación, se perderán hasta el momento en el que sí se realice la solicitud. Veámoslo con un ejemplo.
El 28 de noviembre se cumplieron los 15 días que establece la ley como plazo para poder solicitar la prestación por desempleo de Juan, sin embargo, éste decide solicitarla fuera de plazo el día 4 de febrero. Han pasado nada menos que 68 días desde que se cumplió el plazo hasta que presenta la solicitud. Si tenía un total de 360 días disponibles de paro -que no días cotizados para el paro-, podrá disfrutar sólo de 292 días de prestación.
Como vemos, no se pierde el derecho pero sí que se descuentan todos los días que se hayan dejado pasar, algo que puede ser muy perjudicial. Teniendo en cuenta que, además, cuando se agota el paro se pierden los días cotizados dentro del umbral previo a completar el siguiente período de cotización, en ocasiones es preferible no solicitar el paro y guardar los días de cotización para la próxima ocasión que se pueda solicitar.